Dios, como vuela el tiempo. No fue hace mucho que la Embajada de Chile ofrecio un festival de vinos de Itata y Bio-Bio y de alli paso el Mundial de Rusia y ya nos adentramos a mitad de Septiembre. Muy bien armado el escenario, la decoracion y la comida. La seleccion musical tendria que haber sido tipica de Chile y no tan lounge pero fuera de eso todo muy bien organizado, a la chilena pues.
La oferta de vinos -creo eran 11 bodegas- muy interesante pues no se centraba en las archiconocidas versiones de Cabernet Sauvignon ni en la uva fad del vecino del sur, la Carmenere. Dos cepas muy plantadas en el sur de Francia, Carignan y Cinsault eran el corpus de la presentacion, variedades que no son comunes en nuestro medio. Carignan es el nombre que recibe en Francia la Cariñena, uva tinta de origen español. La Cinsault si es del sur del pais galo, de la region Languedoc-Rousillon propiamente. La Cinsault es una de las cepas mas comunes en la elaboracion de los deliciosos vinos de Chateauneuf du Pape, blends a los que brinda su suavidad y bouquet. Como curiosidad hay que decir que en Sudafrica es conocida como Hermitage y su cruce con Pinot Noir dio origen a la emblematica Pinotage del pais de Nelson Mandela.
Volviendo al evento de vinos, arrancamos con la Carignan, varias rendiciones interesantes, con el caracter rustico que caracteriza a esa cepa, aunque el estilo artesanal que se le quiere impartir esta un poco over the top. De hecho, de los 6 o 7 varietales tal vez uno solo escapaba ese bache. Habiendo catado algunas versiones varietales de Francia, se puede trabajar bastante alli. La Cinsault le fue mejor, vinos mas suaves y sofisticados, con el perfume agradable que caracteriza la cepa. En ambos casos y en el resto de productos (habia algunos de uvas atlanticas) los precios FOB para el importador me parecen algo altos, considerando que son cepas poco conocidas y no asociadas a vino chileno en la mente del consumidor peruano, pero por su calidad imagino no faltara algun comerciante industrioso que les dara una oportunidad en el mercado local, que a Dios gracias, es tan abierto a los vinos de todo el mundo.
Quedamos con las amables -y bellas- embajadoras vinicolas de la region y con algunas bodegas, en visitar Itata y hacer el tour de vinos para degustar con mas tranquilidad los vinos y ver ofertas comerciales, ademas de los atractivos turisticos del Valle de Itata. Pasados los frios de invierno es hora de ir al sur. Copio aqui el link con info turistica.
http://chile.travel/intereses-destacados/rutas-del-vino/valle-de-itata